Por qué ‘Nadie’ es la mejor sucesora de ‘John Wick’ que Hollywood nos ha dado hasta ahoraPor qué ‘Nadie’ es la mejor sucesora de ‘John Wick’ que Hollywood nos ha dado hasta ahora
‘Amanecer de los muertos’ supuso el debut en la gran pantalla de Zack Snyder, y puede que su popularidad haya crecido muchísimo desde entonces, pero ninguno de sus trabajos posteriores había logrado igualar el nivel de su impactante ópera prima. Por eso tenía tantas ganas de ver ‘Ejército de los muertos’, su regreso al cine zombi que es además su primera colaboración con Netflix.
Será el próximo 21 de mayo cuando la película llegue a Netflix, aunque una semana antes tendréis la oportunidad de verla en cines, y sospecho que la pantalla grande le sentará muy bien. Por mi parte, he podido disfrutar ya de ella en casa y no creo que llegue al mismo nivel de su ópera prima, aunque eso no quita que esté muy bien, ya que estamos ante una película salvaje y de lo más entretenida que y además cuenta varias escenas antológicas.
Recuerdo que en la charla con Snyder en la que tuve la oportunidad de participar, el cineasta destacó que uno de sus objetivos con ‘Ejército de los muertos’ era ver hasta qué punto podía retorcer los tropos del cine zombi antes de romperlos, algo que no tarda en percibirse en pantalla. Para bien y para mal, estamos ante una película muy ambiciosa que no tiene problemas en juguetear con varios elementos habituales en este tipo de propuestas.
Eso lleva a que ‘Ejército de los muertos’ sea menos vibrante que ‘Amanecer de los muertos’. Es cierto que el contundente arranque nos mete en situación y que los geniales títulos de crédito iniciales nos preparan para una explosión de violencia, pero luego la sensación de urgencia tarda mucho más en llegar en beneficio de un relato con diferentes frentes pero en el que a la hora de la verdad vuelve a pesar por encima de todo la historia de un padre intentando reconciliarse con su hija.
Eso sí, ahí agradecí enormemente que Snyder rebajase un poco esa intensidad que define a su cine para intentar ofrecer una visión un poco más humana de lo que nos está contando. Tranquilos, eso no quiere decir que se traicione a sí mismo, sino que lo modula todo mejor para que no acaba siendo un sinsentido en términos de tono a la hora de abordar una película que está más marcada que ninguna otra por su presencia.
Y es Snyder ejerce en ‘Ejército de los muertos’ como productor, coguionista, operador de cámara, director de fotografía y director. Aquí no hay un gran estudio limitando su visión como podía suceder en el caso de Warner y sus aportaciones al cine de superhéroes, y la primera consecuencia agradable de ello es que no hay vacíos extraños en la narrativa, de esos que quizá se pueda arreglar con una versión extendida pero que nunca debieron existir.
En ‘Ejército de los muertos’ queda claro que todo lo que deseaba Snyder está en la película, de ahí que su metraje se dispare hasta casi las dos horas y media para dejar que en términos narrativos todo tenga tiempo para respirar. Obviamente hay tramas más importantes que otras y personajes mejor desarrollados -pero todos tienen su oportunidad de brillar-, pero existe esa unidad de la que no siempre hace gala su cine y que ayuda a pasar por alto que la mitología que propone a veces se le escape un poco de las manos.
Se nota en la película que Snyder piensa estar creando poco menos que su obra de zombis definitiva. Y digo obra porque el universo de ‘Ejército de los muertos’ no va a limitarse a esta película, pues también están en marcha una precuela centrada en el personaje interpretado por Matthias Schweighöfer -todo un acierto dedicársela a él, ya que Ludwig es el mejor personaje de la función- y una serie animada sobre la caída de Las Vegas tras el estallido zombi.
Será entonces cuando tengamos una visión mucho más amplia de este universo y quizá se compense el hecho de que el contraste entre dos tipos de zombi no termina de funcionar. Unos acaban siendo poco menos que relleno y en los otros se intenta ahondar un poco en su jerarquía de una forma no especialmente satisfactorio. Eso lleva a que haya ciertos momentos en el tramo central de ‘Ejército de los muertos’ en los que el interés se resiente.
No es que en ningún momento la película se hunda, pero sí es uno de los motivos principales por los que no alcanza ‘Amanecer de los muertos’. Antes de eso habíamos tenido una suerte de mezcla entre ‘Escuadrón suicida’ y ‘Ocean’s 11’ para la formación de esa disparatada misión que lleva a un grupo de mercenarios a Las Vegas para recuperar una cantidad enfermiza de dinero.