Muchas veces confundidas con “las minitas de los músicos” (SIC), invisibilizadas en los festivales, denostadas por un público machista y sólo aceptadas si eran la novia o la mujer de alguna figura, el rock sepultó las aspiraciones femeninas en desde su inicio hasta entrados los años ‘80
Hay una historia muy famosa en el rock argentino y aledaños, que cuenta de la vez que en el BA Rock, el festival que se hizo en Buenos Aires en el 82, cuando le tocaba subir al escenario a La Torre, abordan la escalera Oscar Mediavilla, después el negro García Lopez, Fernando Lupano hasta que agarra la baranda Patricia Sosa ya preparada para cantar, entonces un security la frena y le dice:
Ante los gritos desesperados de sus compañeros tratando de explicarle al macaco que ella era la cantante, el tipo cedió y así llegó Patricia para recibir los aplausos de la multitud que casi llenaba el campo de Obras Sanitarias.